La demolición, un componente esencial en el ámbito de la construcción, implica la destrucción controlada y parcial o la completa eliminación de elementos constructivos o estructuras. Principalmente, se lleva a cabo para permitir nuevas construcciones en un terreno, corregir la inestabilidad o abordar errores estructurales debido a la antigüedad de la obra. A continuación, se presentan algunos consejos esenciales a considerar antes de iniciar cualquier proceso de demolición, con el objetivo de garantizar su seguridad y efectividad.
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Diferencias entre demolición y derribo
La demolición y el derribo se refieren al proceso de destruir una estructura, pero en algunos contextos pueden tener matices específicos:
- Demolición: Este término generalmente se usa de manera más amplia e incluye cualquier método empleado para destruir total o parcialmente una construcción. Puede implicar el uso de técnicas manuales, maquinaria pesada, explosivos o métodos controlados para derribar una estructura. La demolición se aplica tanto a edificios grandes como a pequeñas estructuras.
- Derribo: A veces se utiliza de manera más específica para referirse al acto de derribar o derrumbar una estructura utilizando métodos más tradicionales o manuales, como el uso de mazos, herramientas de mano o maquinaria menos especializada. El término derribo puede asociarse más comúnmente con estructuras más pequeñas o con métodos menos sofisticados.
Consejos para una demolición en tu proyecto de construcción:
Calcular la magnitud de la demolición: Determina los metros cuadrados de muros, pisos, losas u otros elementos a derribar. Este cálculo servirá como base para estimar el tiempo requerido, la cantidad de personal necesario, el volumen de escombros a eliminar y los costos asociados al proceso.
Conocer los requisitos de licencia: Averigua los requisitos específicos de licencia para demoler en tu área. Aunque en la Ciudad de México no se exige licencia para demoler estructuras pequeñas, es crucial informarse y cumplir con los reglamentos locales para evitar inconvenientes legales.
Vigencia y prórroga de la licencia: Verifica la duración de tu licencia de demolición, que suele ser de 3 meses, aunque puede variar según la ubicación y la naturaleza del proyecto. En zonas de conservación, la vigencia puede extenderse a 1 año. En caso de exceder el plazo, obtén una prórroga para evitar sanciones y continuar sin interrupciones.
Tramitación de la licencia: Dirígete a la entidad correspondiente en tu alcaldía o municipio para tramitar la licencia de demolición. Por lo general, este trámite se realiza en la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda.
Preparación antes de la demolición: Retira todos los elementos no estructurales, como puertas, armarios, muebles de cocina y baño, luminarias, ventanas, entre otros. Esta preparación previa facilitará el proceso de demolición y reducirá riesgos innecesarios.
Seguridad en el área de trabajo: Delimita la zona de trabajo con vallas y señalización, especialmente si la construcción está cerca de áreas públicas, para garantizar la seguridad de los transeúntes y evitar accidentes.
Profesionales cualificados: Contrata personal capacitado y especializado en trabajos de demolición. Asegúrate de que la demolición sea supervisada por un ingeniero o arquitecto competente para garantizar un procedimiento seguro.
Inspección detallada previa a la demolición: Realiza una evaluación exhaustiva del inmueble y su entorno para identificar y asegurar áreas potencialmente inestables, reduciendo así riesgos durante la demolición.
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Precauciones con los servicios: Antes de comenzar, asegúrate de cerrar y desactivar los servicios de agua, electricidad y gas para evitar posibles incidentes como inundaciones, descargas eléctricas o intoxicaciones por gas.
Desmontaje desde arriba hacia abajo: Inicia la demolición desde el nivel más alto y procede hacia abajo, de piso en piso. Este enfoque secuencial minimiza los riesgos de colapso y facilita la gestión de escombros.
Eliminación constante de escombros: Retira continuamente los escombros generados durante la demolición para evitar acumulaciones que podrían provocar sobrecargas estructurales y potenciales derrumbes.
Preparación del terreno: Al finalizar la demolición, el terreno debe quedar limpio, estable y nivelado, listo para iniciar una nueva construcción desde cero.
Manejo seguro de estructuras externas: Si requieres escaleras o andamios para trabajar en elementos exteriores, evita apoyarlos en las estructuras a demoler. Los andamios son recomendables para alturas superiores a 2 metros para garantizar la seguridad del personal.
Control de la contaminación: Para evitar la dispersión del polvo generado por la demolición, instala una malla protectora alrededor de la zona de trabajo y riega el área de forma regular. Esto minimiza la liberación de nubes de polvo hacia áreas públicas, previniendo la contaminación del entorno.
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El costo asociado a una demolición
Complejidad de la estructura
El número de niveles, el tipo de cimentación y la estructura en sí misma impactan en los costos. Estructuras más complejas o con cimientos sólidos pueden requerir métodos de demolición más especializados, lo que aumenta los costos.
Método de demolición
El uso de maquinaria especializada o la ejecución manual influyen en los costos totales. La demolición manual suele ser menos costosa en comparación con el empleo de maquinaria pesada.
Seguridad y equipo requerido
La seguridad es primordial en este tipo de trabajos. El costo puede aumentar al adquirir el equipo de seguridad necesario y garantizar la contratación de mano de obra calificada para minimizar riesgos.
Es importante resaltar los riesgos asociados con la demolición y la necesidad de medidas de seguridad:
- Golpes y caídas: Riesgo de lesiones por herramientas o caídas desde diferentes alturas, lo que puede resultar en fracturas u otros daños.
- Atrapamientos y derrumbes: Existe el riesgo de quedar atrapado entre los escombros o enfrentar derrumbes imprevistos durante el proceso de demolición.
En caso de accidentes, es crucial saber cómo reaccionar adecuadamente y tener un plan de acción definido para garantizar la seguridad de todos los involucrados en la obra.
Seguir cuidadosamente estos consejos y consideraciones, además de adoptar medidas de seguridad adecuadas, no solo ayuda a evitar multas o clausuras, sino que también garantiza una demolición segura y efectiva en tu proyecto de construcción.
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